La Villa de los siete sietes. Siete iglesias, fuentes, plazas, conventos, puertas, casas nobles y pueblos en su alfoz, Olmedo pertenece a la Denominación de Origen de Rueda, sinónimo de los vinos blancos elaborados con verdejo más internacionales, ampliamente conocidos y valorados en todo el mundo.

El paisaje alrededor de nuestra bodega es recorrido por el Adaja y el río que da nombre a nuestra bodega: el Eresma. Su frondosa ribera es un conjunto de interés natural que, junto con las aguas mineromedicinales de su balneario y el parque temático del Mudéjar, hacen de Olmedo un destino muy propicio para el enoturismo.

Nuestro compromiso con el entorno natural que rodea las bodegas nos ha llevado a construir una instalación fotovoltaica solar para autoconsumo que evita la emisión de 42 toneladas de CO2 a la atmósfera al año, equivalente a la plantación de 4.163 árboles y el ahorro de 10,54 toneladas de combustible fósil.

Las llanuras de la Tierra de Pinares, recortadas por cerros aislados, rodean nuestras bodegas y viñedos, y son el hábitat natural de chopos, fresnos y aún de algunos olmos. Numerosos Espacios Naturales de nuestro entorno han sido declarados Lugares de Importancia Comunitaria de Castilla y León, como los Humedales de los Arenales, las Lagunas de Coca y Olmedo y las riberas del Adaja y el Eresma, donde anidan abubillas, avutardas, garzas, milanos, herrerillos, halcones pelegrinos, aguiluchos y gavilanes, y en los meses cálidos crían las nutrias.

Estos pinares y humedales son habitados por tejones, zorros, murciélagos de Cabrera, jabalíes, visones, gatos monteses, culebras e incluso lobos. En el paraje de La Cerrajera, situado en el camino hacia La Mejorada, se da una gran concentración de cigüeñas durante el verano.